Diario 30 de Octubre de 2017:

La vida es como jugar a las siete y media, nunca sabes donde te vas a plantar, pero yo he decidido seguir jugando.

En el día de hoy estuvimos realizando los juegos que se nos pidieron hacer con modificaciones, para que fueran inclusivos. Los juegos que realizamos fueron:

· Juego teléfono escacharrado: este juego lo realizo el profesor, el dio un mensaje a la compañera y se fue pasando por todos, la última persona dijo el mensaje en voz alta y no era ni parecido a la que se había mandado en un principio. Y en lugar de que la última fuera la única persona que dijera lo que había recibido, todos fueron diciendo que mensaje era el que les habían dado. Son juegos de memoria, atención y pronunciación, ya que si no realizas esto, el mensaje no llega. Después se jugó mandando en lugar de un mensaje oral con ritmos en la espalda.

· Juego de la gallinita ciega: una compañera salió para explicar su variación del juego y estuvimos jugando. En esta ocasión la variación consistía en que había varias gallinitas ciegas, y se ponía música mientras las gallinitas daban vueltas, y los participantes se movían por el espacio. Cuando la música paraba las gallinitas iban a buscar a la gente, y los demás debían de permanecer quietos. Si adivinaban las gallinitas quienes eran a los que tocaban se convertían con ellas en gallinitas.

·  Juego 1, 2, 3: este juego consistía en que la clase se dividía en 3 zonas, y había que ir a cada una de las zonas según el  número que dijera la persona que se encargaba del juego. Pero este juego no salió bien, ya que no habían quedado claras las reglas del juego.

· Juego adivina el animal: a los participantes se les decía un animal que ellos posteriormente tendrían que realizar con gestos cuando estuvieran repartidos todos los animales. De esta forma tendrían que encontrar a su pareja, observando los gestos de sus compañeros.

· Juego estatuas de cera: se pone música y los participantes se van moviendo por toda la clase, cuando la música para tienes que quedarte quieto, si te mueves te vas eliminando. La modificación es que va cambiando, a veces tienen que ir en pareja y otras en solitario.

· Juego del pañuelo: se juega como siempre, dos equipos en los que cada uno es un número y cuando la persona que tiene el pañuelo dice un número los que lo tengan de ambos equipos van a por el pañuelo y tienen que volver a sus posiciones.  La modificación fue que en un momento del juego varios números se cambian de equipo y que los equipos los forma la maestra, además no hay puntos, por lo que nadie gana.

· Juego tulipán: este juego lo realice yo. Este juego se realiza como siempre: uno de los participantes se la liga y tiene que perseguir a los demás para pillarlos. Pero si antes de que les pillen dicen “Tulipán” y se quedan con los brazos en cruz sin moverse, no se les puede pillar, y estos no pueden retomar el juego hasta que un compañero le dé en la mano. Para que el que se la liga sea más fácil pillar, solo se puede decir “Tulipán” dos veces. Y a los que pilla tendrán que pillar con él también.

Los problemas que surgieron fueron que hay que estar muy atento cuantas veces dicen “Tulipán”, ya que se puede hacer trampas. Y los problemas habituales de he dicho “tulipán” antes de que me pillaras.

Fueron juegos divertidos, y en todos surgió algún problema. Lo importante en el juego era la actitud de la persona que presentaba el juego. Por ejemplo, en el de la gallinita nos tuvo que explicar varias veces el juego para que lo entendiéramos. En otros, costaba que saliera gente a participar en los juegos. Había que sacar directamente a las personas y que no les diera tiempo a pensarlo, explicar el juego claramente y asegurarse de que lo habían entendido. Y si surgía algún problema intentar solucionarlo en el momento.

Creo que al final nos lo pasamos bastante bien y nos reímos mucho con los juegos. Además creo que las modificaciones de los juegos son buenas, ya que permiten que los niños no se frustren jugando, ya que cuando no pueden pillar a alguien, van perdiendo confianza y pierden interés en el juego. También que sea acumulativo, que no se queden solos pillando les ayuda en tener mayor confianza. Que nadie pierda el juego, es bueno para que nadie se sienta mal por perder, pero tampoco hay que abusar de los juegos donde no haya ganadores ni perdedores, debemos enseñarles a saber ganar y saber perder sanamente. Por lo tanto, pienso que estas modificaciones que se han realizado han estado estupendas.